10. Milla Jovovich
De niña, se mudó con sus padres de la URSS a los Estados Unidos. Al principio, la niña tenía problemas para comunicarse con sus compañeros: no la aceptaban y la llamaban espía.
Pero luego, a los 11 años, tuvo la oportunidad de convertirse en modelo, y a los 13 apareció por primera vez en una película. Milla aprendió de primera mano lo que es la arrogancia: fue grosera con su madre, se peleaba constantemente con ella y comenzó a consumir alcohol.
La comprensión de que el éxito puede ser fugaz si no trabajas para mantenerlo llegó a la edad de 22 años. Si Milla Jovovich no hubiera decidido convertirse en la mejor versión de sí misma, nadie sabe a quién habríamos visto en el “Quinto elemento” y “Resident Evil”.