Repasamos los estilismos nupciales más peculiares (y horteras) de las celebridades. Volúmenes, brillos y diseños imposibles que han hecho historia.
1. Céline Dion
La cantante se casó con el productor musical René Angélil en 1994, en la basílica de Notre-Dame de Montreal. Céline Dion lució en su boda un vestido abullonado, con encaje y pedrería. Bajo la torera de piel se ocultaba un cuerpo tipo corset con escote corazón y lentejuelas. Excesivo volumen, excesivo brillo, excesivo todo. Atención especial a la corona.
2. David Beckham
Tras la ceremonia eclesiástica, Victoria y David Beckham se cambiaron para la fiesta y baile. El recién estrenado matrimonio decidió ir a conjunto con un total look púrpura en el que incluyeron a su primer hijo Brooklyn (ahora reconvertido en it boy). El vestido con adorno floral de Victoria puede salvarse de la hoguera pero el traje de David no tiene perdón. Un dos piezas satinado, sin camisa, satén arrugado, crucifijo al cuello… Después Victoria se hizo diseñadora y ahora derrochan glamour.
3. Emma Thompson
La actriz Emma Thompson se casó con el director y actor Kenneth Branagh en 1989 con un peculiar diseño nupcial. Un dos piezas corto, con estampado floral y colores pastel. Además de un tocado a juego con el vestido de tul y plumas.
4. Diana de Gales
La boda de Lady Di con Carlos de Inglaterra en 1981 fue la obra cumbre del barroquismo nupcial. Atrás quedaba el minimalismo de los años 70, se abrió la veda del más es mejor. Los diseñadores David y Elizabeth Emmanuel confeccionaron este vestido lleno de volúmenes en seda de tafetán, encaje antiguo y 10.000 perlas bordadas. El diseño en cascada del ramo de flores lo imitaron miles de novias por todo el mundo.
5. Lake Bell
La actriz se casó en 2013 con este vestido de Marchesa. Un diseño de inspiración años 20, siguiendo el estilo del El Gran Gatsby (del que se estrenó el remake ese mismo año). Provoca sentimientos encontrados, o te encanta o te parece lo peor.
6. Mariah Carey
La cantante se casó con el productor musical Tommy Mottola en 1993. Mariah (que nunca deja indiferente a nadie) lució un diseño de Vera Wang inspirado en el vestido de Lady Di. Volumen, brillos, mangas de farol y un gran ramo de flores.
7. Tommy Motola
Tommy Mottola se enfundó un frac satinado para su boda con Mariah Carey. Con pajarita blanca, el productor nos recuerda más a un tenor a punto de salir al escenario que un feliz novio.
8. Mary Charteris
La aristócrata e it girl británica se casó en 2013 con este vestido de Pam Hoog, el diseñador favorito de celebridades como Lady Gaga. Un diseñado con transparencias, volantes y tul que en Twitter recibió comentarios como: «hay vestidos feos, y después este.»
9. Rita Wilson
La actriz se caso con Tom Hanks, en 1988, con un vestido corto, de escote corazón, ceñido, con pliegues, tul, volantes y medias de cristal. Un diseño difícil que, sin embargo, les ha traído suerte: llevan casi 30 años juntos, siendo uno de los matrimonios más longevos de Hollywood.
10. Salma Hayek
La actriz y el empresario de la moda, Francois-Henri Pinault, celebraron su boda en Venecia en 2009. Salma, que no destaca casi nunca por su minimalismo, escogió para esta celebración un diseño de Nicholas Ghesquire para Balenciaga. El cuerpo del vestido era todo de pedrería y la falda de amplio volumen de satén en color champán. Sin duda no es el peor vestido de novia, pero podría haber sido mejor.
11. Thalía
Tras su divorcio de Mariah Carey, Tommy Mottola contrajo nupcias con Thalía. La diva del pop latino lució un vestido, diseñado por Mitzy, que pesaba 70 kilos. Contaba con hilo de plata, 100 metros de seda y una cola de 16 metros, (equivalente a un quinto piso de altura). Inspirado en los vestidos de la mujer de Maximiliano de Habsburgo, la emperatriz Carlota, Thalía fue una de las novias más comentadas en el año 2000.
12. Tina Turner
Pareja desde hace 29 años, Tina Turner y Erwin Bach se casaron en Suiza en 2013. La cantante lució un vestido de largo asimétrico en tul verde y negro de Armani, (el diseñador acudió a la boda como amigo íntimo del matrimonio). El cuerpo en satén plisado, la falda con excesivas capas y los leggins brillantes no nos convencen para una reina del rock como ella.